Ecuador: diez días de Paro Nacional, represión militar y asesinato de un manifestante indígena

En Ecuador, la jornada de movilización que se desarrolla desde el inicio del paro nacional ha estado marcada por la violencia ejercida por fuerzas militares y policiales contra las comunidades que sostienen cortes de ruta y concentraciones en distintas provincias.
 
Ayer, en Quito, un plantón estudiantil en apoyo al paro realizado en la Plaza Indoamérica fue brutalmente reprimido. En las imágenes también muestran la resistencia en Huaycopungo, Otavalo, donde miles de manifestantes lograron hacer retroceder al ejército que intentaba disolver la protesta. Las organizaciones sociales denuncian que desde que el presidente Daniel Noboa ordenó la presencia de tropas en las calles, la represión se intensificó con el uso desproporcionado de la fuerza contra quienes protestan.
 
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) denunció en la red X que el Gobierno “convirtió los territorios indígenas en un campo de guerra contra el pueblo”. En paralelo, la Oficina Regional para América del Sur de la ONU para los Derechos Humanos expresó preocupación por la escalada de violencia y llamó el lunes 29 de septiembre a abrir un “diálogo urgente” en el país.
 
La represión ya cobró la vida de Efraín Fuerez, de 46 años, integrante de una comunidad indígena que participaba en bloqueos en Cotacachi (norte). Según las comunidades, fue asesinado a balazos durante un operativo militar que intentaba desalojar una de las medidas de protesta el domingo 28.
 
Además, doce personas permanecen detenidas desde el primer día de las manifestaciones, cuando se produjo un enfrentamiento en el Comando Policial de Otavalo, Imbabura. Todas ellas están siendo procesadas bajo cargos de “terrorismo”, una acusación que es rechazada por las organizaciones indígenas y de derechos humanos, que advierten que se trata de un intento de criminalizar la protesta social.